Los perros Canis Lupus Familiaris llevan evolucionando junto a la humanidad aproximadamente 25.000 años.
Precisamente en la clasificación taxonómica de las especies, son los ÚNICOS que tienen este tercer apellido: familiaris, precisamente porque su desarrollo evolutivo se ha dado gracias a estar cerca de los asentamientos humanos, tanto en nuestro proceso como seres nómadas, como en los primeros asentamientos humanos hasta el día de hoy.
Realmente los perritos son una especie que merece nuestra profunda admiración, ya que han sido los ÚNICOS animales que se han atrevido a acercase a nosotros, siendo los humanos una especie tan extraña caracterizada por la violencia, explotación de recursos, etc.
Seguramente la biología, el universo o Dios, nos ha puesto a estos seres tan maravillosos en nuestro camino evolutivo para que aprendamos sobre la esencia real de la vida, sobre el altruismo, la lealtad, el varadero valor de la inocencia y el amor incondicional!!

Desde un punto de vista Etológico, la relación social entre los Homo Sapiens y los Canis Lupus Familiaris se denomina MUTUALISMO INTERESPECÍFICO.
Es decir que tanto los perros, como los humanos nos hemos beneficiado mutuamente durante esta aventura evolutiva. Seguramente ellos nos avisaron sobre la presencia de predadores o extraños acercándose a nuestros asentamientos, también fueron de gran ayuda durante la cacería. Igualmente nosotros compartíamos nuestros desperdicios alimenticios con ellos, al igual que generamos una sensación de confianza porque juntos podemos defendernos mutuamente y cuidar nuestras espaldas durante el proceso migratorio.
Miles de años han pasado, y este mutualismo se sigue presentando, obteniendo múltiples beneficios para ambas especies.
En Cultura canina, mediante nuestro Colegio pedagógico canino y Guardería campestre nos enorgullece fortalecer este lazo y potencializar el histórico Mutualismo entre nuestras familias y sus perritos.
